La violencia contra el hombre en las parejas

Actualmente, la mayoría de los maltratos que se producen en las parejas y que tenemos constancia viene por parte de los hombres. Es raro pensar que se produzca una violencia contra los hombres en una pareja, ya que por regla general, éstos físicamente son mucho más fuertes que las mujeres. Sin embargo, un caso de maltrato al hombre es mucho más habitual de lo que nosotros pensamos. Estos abusos, lo sufren bastantes varones, sin importar la edad, ocupación u orientación sexual.

He visto que hay muchos artículos acerca de la violencia de género machista. Quizás el hecho de que yo sea mujer me facilita un poco poder hablar de la violencia contra el hombre, un tema que por cierto no se cita con tanta frecuencia, al menos yo no lo veo.

Lo que significa para él la violencia contra el hombre

Como decíamos anteriormente, la violencia contra el hombre es mucho más habitual de lo que pensamos. De hecho, se estima que una de cada tres víctimas de violencia doméstica son hombres. El problema principal es que en este caso se suele ser mucho más reacio a informar por la vergüenza que se puede sentir. Un hombre maltratado se enfrenta a múltiples obstáculos: no dispone de los recursos que tiene la mujer para pedir ayuda, se enfrenta al escepticismo de la policía, a las trabas para reclamar la custodia de sus hijos… En definitiva, si se llega a este caso, lo tiene bastante más difícil.
Los maltratos hacia el hombre pueden consistir en: abusos verbales, humillaciones, calumnias e infamias, amenazas de denuncias aprovechando la protección de la mujer en este sentido, amenazas con impedir ver a sus hijos…
En caso concreto de parejas homosexuales, esta violencia al hombre puede consistir en: amenazar con dar a conocer la identidad sexual a todo su entorno, mofarse de su homosexualidad, hacerle sentir mal y justificar los maltratos haciendole creer que se lo merece debido a su supuesta desviación sexual…
Por otra parte, muchas personas no entienden por qué cuando una mujer es maltratada no deja a su pareja. Sin embargo, si el caso es de  violencia contra el hombre, el desconcierto es mucho mayor. Sólo quien haya sufrido un maltrato sabe lo difícil que es romper una relación de pareja. Entre los motivos principales para  que sean reacios en querer dejar a sus parejas podemos destacar los siguientes:

1. Miedo por perder a los hijos o querer intentar protegerlos.

   Se da el caso de que existe una preocupación por dejar al hijo con el cónyuge maltratador/a por temor a que le hagan daño. También es posible pensar que en el futuro se pueda encontrar con serias dificultades para obtener su custodia o tener acceso a ellos.

2. Sentirse avergonzado.

   Cuando se produce la violencia contra el hombre, generalmente ésta suele ser vista con risas entre las demás personas.

3. Dificultad para ser creído por las autoridades.

   Generalmente la policía no suele dar mucha credibilidad a los hombres maltratados, o en caso de creerse, se minimizan los abusos por el simple hecho de ser hombre.

4. Negación del problema.

   Esto es común en los dos géneros, independientemente de la parte que sea maltratada.

5. En el caso de algunos homosexuales, temor a tener que reconocer públicamente su identidad sexual.

   Algunos homosexuales no quieren por nada del mundo, ya sea por temas laborales o por cualquier otro motivo, reconocer públicamente lo que realmente son.

Cómo actuar en caso de ser un hombre maltratado

El abuso doméstico puede tener un grave impacto físico y psicológico, tanto para el hombre como para sus hijos. Por lo tanto, el primer paso que hay que dar es hablar del caso de violencia hacia el hombre con alguien en quien realmente puedas confiar. Además de poder desahogarte, el hecho de contárselo a otra persona te permite tener un testigo que te pueda dar soporte a futuras acciones que puedas tomar. Hay que tener una cosa clara: admitir el problema y buscar ayuda no significa que se haya fallado como hombre. Tú no eres el culpable y no es de débiles ni cobardes admitir un problema. Dicho esto, hay una serie de consejos muy útiles que puedes tener en cuenta cuando te veas envuelto en una situación violenta:

• Salir de casa.

  Cuando ves que se va a producir una situación violenta lo mejor es intentar salir de casa. Si crees que en ese momento  tu hijos corren peligro, llama a la policía.

• Intentar obtener pruebas del maltrato a los hombres.

  Además de denunciar los hechos, debes obtener pruebas fotográficas de las heridas que puedas tener e ir al médico para que haya parte de lesiones.

• No tomar represalias.

  Si la mujer te está maltratando físicamente, sal de casa, pero nunca respondas a esa violencia hacia los hombres. Si ella te denuncia tienes todas las de perder.

• Tener las pruebas siempre accesibles.

  Por ejemplo en el smartphone. En caso de tener que salir corriendo con tus hijos debes presentárselas rápidamente a la autoridad pertinente

• Buscar asesoramiento.

  Es importante pedir consejo legal en caso de que pueda surgir algún imprevisto y no saber qué hacer.

Por otra parte, buscar la ayuda de tu familia y amigos, terapias o grupos de apoyos; te pueden ayudar mucho a sobrellevar esos problemas. Seguro que en los grupos te sorprendes en descubrir que hay algún que otro caso de violencia contra el hombre.
fuente:
http://terapia-depareja.com/la-violencia-contra-el-hombre/